miércoles, 31 de mayo de 2006

El de-water sobre el estado de la NA(ción)

Si a los españoles nos interesase la política, estoy seguro que muy pocos se hubieran tragado el tostón culebrero que tuvieron que soportar los compañeros de los medios de comunicación y los que suelen quedarse dormidos en la tan bendita siesta con los bichos de la 2, y que con muy mala fe, les privaron de tal éxtasis.

El de-water, perdón por las connotaciones, fue digno de cualquier república bananera del tres al cuarto, la cual se jacta de su propia grandeza mientras que los ciudadanos (o súbditos) se quedan con la cara de tontos y con la misma sensación del que ha sido timado por el trilero menos experto.

La sarta de cifras, números, estadísticas, cuadrantes y referencias continuas a un pasado que es mejor olvidar, obedecía a una carencia manifiesta de altura y discurso político, por parte, no de unos pocos, sino de todos y cada uno que tuvieron la desfachatez de subir al estrado sin haberse preparado su clase con pretensión apodíptica.

A los españoles no nos interesa la política, pero sí nos interesa que se conozca la verdad de la cosas, que se conozca qué pasará con las promesas realizadas (véase ministerio de la vivienda), porqué está el gobierno electo tomando cafetitos con unos tíos que deberían estar en la cárcel como corresponde a todo asesino reconocido. A los españoles nos interesa saber cómo ganando sueldos irrisorios (véase Andalucía y Extremadura) podemos llegar a fin de mes pagando más por lo que siempre debebía costar lo mismo.

Si Rajoy calla ante los problemas reales supongo que no será porque haya pactado una bolsita de esas de Marbella bajo cuerda. Y si ZP vocea las bondades de su gobierno con gráfica en mano, cual Tizona, mientras conmemora la gestión de Aznar y hasta de Fraga, no será porque haya logrado algo (véase inmigrantes y mucho más). Lo cierto y verdad es que ya, de lo que tenemos ganas los españoles es de coger el debate por donde se pueda y tirarlo allí donde hace falta una cisterna doméstica, para quedarnos más tranquilos y pensar que, al menos, tuvimos la valentía de mandar a todos estos ladrones de esperanzas y de honorarios, allí donde deberían estar hace muchísimo tiempo. De la Na(ción) ni hablar. ¿Para qué?

martes, 23 de mayo de 2006

La mentira del estatuto andaluz en el Congreso


Si todo corre por su cauce, hoy se dará el primer paso parlamentario para la consecución de la tropelía que supone la aprobación del estatuto andaluz de autonomía, -y lo de autonomía nunca mejor dicho-. El trámite en el Congreso de la soberanía popular se nos antoja como menos una pantomima que sólo servirá para que algunos políticos justifiquen su cuantioso salario.

La discusión y el debate de los artículos se convertirá en un ir y venir de aporías ideológicas que se someterán al yugo del voto mayoritario y la causa nacionalista neoprogre de las palmarias autodeterminaciones. Porque las historias nacionales que se cuentan para darse la importancia y la categoría de pueblo específico no tienen nada que envidiar a las de un tal Dan Brown y su Código da Vinci.

No hay más que escuchar a los que pretenden imponer la lengua andaluza como diferente del español con acento, ni siquiera un dialecto de éste. O encontrar en Séneca y Trajano las raíces del pueblo andaluz, diferente de todo lo que fue, pudo y existe hoy día más allá de Despeñaperros. Más cercanos a nuestros hermanos magrevíes, de común pasado, que a los que aún se hacen llamar españoles.

Y en todo este enfrascado, las acusaciones del señor Chaves y de todo el aparato socialista tildando de antidemócratas y antitodo a los señores del Partido Popular por no aceptar el mejor de los mejores estatutos posibles en esta bendita tierra de María Santísima de Rosa en la Mano, izquierda, por supuesto. Porque consenso, para éstos, significa simplemente acatar lo que el poder ordena, dicta y manda como lo que es bueno para sí.

Y lo dicho, un estatuto sin acuerdos, sin consenso y sin diálogo, que huele un poco a artimañas de pecunia, en cuya historia nacional quedarán non gratos los que no agachen el cabezo y besen la mano del todopoderoso. Amén.

sábado, 20 de mayo de 2006

Un nuevo empuje para la religión en España

Y Jesús dijo a Zaqueo, "hoy me quedaré en tu casa". Así, como muchos sabrán ya, el 8 y 9 de julio de 2006 tendrá la lugar la visita de Benedicto XVI a España con ocasión del V Encuentro Mundial de la Familia. Para todos los españoles supondrá una gran honra y alegría disfrutar de dicha presencia, aunque no estaría mal que el boato fuese acompañado de la negociación y la exigencia de los acuerdos entre el Estado Español y la Santa Sede, sobre todo, el de 1979, ya en plena democracia para que se enteren algunos.

El momento no puede ser más oportuno, porque aprobada la LOE en el Congreso, es el turno de los parlamentos autonómicos y de sus decretos para hacer efectiva la ley adaptándola a las realidades regionales, -aquello famoso de los diecisiete sistemas educativos-. Ya, la asignatura de la religión queda muy tocada, aunque no herida de muerte.

Así, el momento es oportuno porque las propias palabras de Benedicto XVI pidiendo la equiparación de la asignatura de religión, tal y como reza el acuerdo, pueden pesar bastante en cuanto los medios de comunicación se hagan eco de ello. Queda un año de arduas negociaciones y de pactos de pasillo, de tácticas electorales y de promesas vacuas. Y, es que la visita del Papa puede suponer un empuje a esa desazón propia de las vasijas de barro que son los cristianos y sus pequeñas causas. Y todo no está perdido como muchos quieren hacernos creer, aunque la ley que para todos sea la misma y quede incumplida diariamente, sobre todo, por aquellos que han de garantizar su cumplimiento.

Zapatero va a aprovechar la visita para conocer al Papa, ha dicho. Como cuando Zaqueo se subió a la higuera para ver pasar a Jesús. Lo que sucede es que ni Zapatero se ha subido a la higuera ni está dispuesto a renunciar a la mitad de su idílica Ex-paña, y ni mucho menos, a restituir cuatro veces más a todos los que no ha quitado algo. Sólo queda saber qué dirá cuando se le pregunte por los matrimonios de colores y la investigación con embriones humanos, dignos también de todo respeto y derecho.

miércoles, 10 de mayo de 2006

EL Sevilla F.C. en la final de la UEFA

El sentimiento y la ocasión lo requiere. El Sevilla F.C., tras cien años de existencia, librará hoy su batalla más importante y fundamental, casí su esencia como club sufridor y grande.
Hoy quedarán atrás rencillas personales, descensos administrativos, avatares con sentido y sin él, los sufrimientos de un casi que era la nota dominante en el equipo de Sevilla, el Sevilla.

Hoy no puedo estar en Eindhoven, pero con mi pensamiento, mi sentimiento y hasta mi oración, acompaño al Sevilla, a mi Sevilla ante la más grande gesta de su historia, la final de la Copa de la UEFA de este año 2006.

Hoy muchos se sienten sevillistas y el olvido mediático ha caído, porque la grandeza del Sevilla no podía ser más tiempo ignorada. Cuántos han luchado por este Sevilla y hoy están desde el cielo mirando y llorando por la alegría de ver a su Sevilla en la final, llorando por la alegría de los que aún seguimos por aquí recordandolos.

El sentimiento y la ocasión lo requiere, y el Sevilla F.C., gane o pierda ya no se podrá desgajar de nuestros corazones, de mi corazón sevillista. ¡¡¡Vamos mi Sevilla, yo te llevo dentro de mi corazón!!!, como reza una de las cantinelas del Ramón Sánchez Pizjuán.

Felicidades a todos, los que se alegran y los que no, porque el Sevilla F.C. hoy representa a Sevilla, a Andalucía y a España entera. Por eso no se puede pedir más.
Viva el Sevilla hasta la muerte, ¡¡¡VIVA EL SEVILLA!!!

jueves, 4 de mayo de 2006

Aprobado el nuevo estatuto andaluz

No se puede negar que la manifestación de poder exhibida por parte del gobierno andaluz en coalición onerosa con IU sale fuera del alcance de todo intento de pacto sincero y de todo pacto en pro de la ciudadanía andaluza.

El "como sea" socialista no podía ser menos en Andalucía y el estatuto de esta nueva "realidad nacional",además de "nacionalidad histórica" no sabemos desde cuándo, se ha erigido contundente y fuerte para todos los andaluces, aunque sin contar con casi la mitad de los mismos.

La propia alegría de los socialistas y "comunistas" andaluces al ser aprobado el estatuto, sonaba a un "por poco" que podría augurar el cambio del régimen caciquil-democrático sostenido en este último solar de España.

Porque lo más importante para Chaves es el poder hablar "de tú a tú" con Madrid, el poder discutir cuánto quiere para, dice, su pueblo. Pero lo más importante en todo este asunto,qué altura tomarán los lindes de Andalucía con respecto a lo que antes se hacía llamar España.

El blindaje económico, fundamentalmente, y las demás competencias, va a dejar a Andalucía fuera del alcance de toda justicia real y a la merced de los dueños del cortijo sureño, para, en vez de progresar, volver al vasallaje medieval y la servidumbre al señor feudal.

Y como se dice, mientras hay vida hay esperanza, y el referendum marcará lo que la mayoría de andaluces considera que somos y queremos tener. Lo peor es que la maquinaria mediática de desprestigio de la opinión contraria bien engrasada y lista para su labor, haciéndonos creer que este estatuto es de primera, el único y el mejor.